Ya antes se había calculado el tiempo de separación de estos dos representantes de nuestro género humano, pero había sido realizado mediante pruebas de ADN, que estima la divergencia hace uno 370 mil años.
En este nuevo estudio, los autores han utilizado la morfología de los cráneos para llegar a una estimación independiente de cuando divergieron estas dos especies. Tim Weaver y sus colegas compararon 2524 cráneos de humanos modernos y 20 de neandertales, luego contrastaron esos resultados con la información genética de una muestra de 1056 humanos modernos.
Los sapiens tienen cráneos diferentes ya que se expandieron desde África, y los neandertales desde Europa. Lo que hicieron los autores fue buscar las diferencias.
Parte de este estudio ya había sido dada a conocer en agosto del año pasado por Mundo Neandertal, la parte en que los autores dicen que las diferencias entre ambas especies no se deben a la selección natural, sino que son cambios al azar que se fueron acumulando con el tiempo, se debieron a la deriva génica.
El nuevo estudio será publicado en Proceedings of the National Academy of Sciences.
Vía Dienekes
Comentarios
Uno de los problemas con las estimaciaones genéticas de edades es que se basan en otras estimaciones basadas, sí, en el registro fosil, que sin embargo puede ocultar diferencias aín más antiguas. En un estudio reciente publicado en PLOS Genetics, los cálculos standard de divergencia entre chimpancés, bonobos y humanos/as producen un resultado demasiado reciente para coincidir con la teoría generalmente aceptada de que los bonobos se separaron de los chimpanzes con la formación del río Congo. Al menos un 15% más haría falta para hacerlo plausible.