Qué título, ¿eh? Así titularon en DiscoveryNews el descubrimiento de que los neandertales tenían antebrazos cortos en relación con el húmero. O sea que la parte baja del brazo es más corta que en los humanos modernos por decir.
La noticia cuenta que un grupo de científicos rusos han descubierto restos de un neandertal que tenía “super antebrazos”, lo que sugeriría que los neandertales tenían muchas hormonas masculinas.
El artículo científico que han publicado los científicos rusos fue publicado en Archaeology, Ethnology & Anthropology of Eurasia. Según dijo Maria Mednikova a Discovery, directora del grupo, “el método común para matar animales entre los neandertales era el contacto directo con la víctima”. En vez de dispararle de lejos con una lanza arrojada, o con flechas, los neandertales atacaban y clavaban de cerca sus lanzas, dice la autora.
Así los autores dicen que tanto hombres como mujeres neandertales, tenían una gran masa muscular. Pero los hombres tenían los antebrazos con musculatura muy desarrollada, y en especial el brazo derecho.
Los restos que analizaron son un húmero de neandertal de 100 mil años de antigüedad descubierto en Khvalynsk, Rusia. Analizándolo con rayos x y tomografía computada, pudieron ver que el hueso es muy grueso, y que tenía marcas dejadas por músculos muy desarrollados.
Cabe aclarar que se trataría de un neandertal antiguo, que todavía no tenía la tecnología que los caracterizaron luego, ya que los autores lo relacionan con un período achelense o musteriense temprano.
El paleoantropólogo John Hawks escribió sobre el asunto en su blog. Resumiendo, concluye que mucha prueba no hay de que los neandertales tuviesen exceso de hormonas masculinas.
Comentarios
De este tema de las hormonas, como dijo Hawks no hay realmente pruebas genéticas, pero es de momento, pues el genoma aun no se ha completado.
Con todo, creo que es generalizar un poco demasiado decir que todos los neandertales tenian brzos como Popeye, con solo un fóssil de 100.000 años.
Cuando se han estudiado las puntas de piedra de "caza", se han elegido puntas pesadas, anchas y masivas, que probablemente jamás estuvieron ni siquiera puestas al final de un astil de madera.
Así, es una profecía autocumplida, Se dice: "Ey, esas puntas no se pudieron usar para cazar a distancia." Pero es que, para empezar, nunca se deberían haber elegido como candidatas.
Por el contrario, cuando se usan índices reales del tamaño y forma de proyectiles de piedra auténticos (usados por pueblos "primitivos actuales"), resulta que entre las herramientas neandertales sí que hay abundantes puntas que cumplen esos criterios.
Y además, en varios yacimientos (en Italia, en la P. Ibérica) se ha descubierto que esas puntas (que podrían ser proyectiles) además tienen huellas de impacto, compatibles con un uso lanzado.
En cuanto a la idea de que los neandertales tenían un brazo derecho mejor preparado para golpear o empujar que para lanzar, es, basicamente, una bobada como un templo.
Recuerdo que me leí el artículo en cuestión y daría risa si no resultara lamentable que esas publicaciones llegen a revistas de impacto.
En el artículo estaba lleno de incongruencias, como si los autores ya hubieran decidido previamente cual era la conclusión deseada y quisieran hacer pasar los datos por un embudo para que apoyaran su teoría.
Se insistía en que las deformaciones óseas en las articulaciones del brazo neandertal eran incompatibles con que los neandertales hubieran lanzado frecuentemente objetos. Pero es que mirabas las tablas de sus propios resultados y si siquiera se correspondían los resultados con sus conclusiones. Había ejemplos de poblaciones que no mostraban ninguna "deformación de tirador" y que debían tenerla por sus actividades. Y al contrario, había grupos que no habían tirado una lanza/jabalina en su vida y tenían esa deformación (por ejemplo, remeros).
En cuanto a este último artículo y su correlato hormonal, incluso si su propuesta me pareciera interesante (que no: no me parece nada sólida) el que se basen en los otros trabajos de los que he hablado me parece que los hace poco fiables.
En este caso, es del subtipo "El neandertal era Conan".
El razonamiento de fondo de estos trabajos suele ser:
Las incapacidades neandertales respecto a los humanos modernos son tan grandes que aquellos debieron tener otros sistemas adaptativos que compensen sus enormes deficiencias cognitivas. Vamos abuscar en su fisiología algún rasgo destacado, lo exageraremos de manera desmedida, y así además conseguiremos titulares llamativos.
En este caso, una fuerza sobrehumana que compense su carencia de armas naturales (como los carnívoros) y su carencia de inteligencia (como los sapiens).